Ayer era un día especial para el Atlético de Madrid, y esque se celebraba el día de las peñas. Multitud de aficionados se trasladaron a Madrid desde distintas ciudades con un motivo común, ver a su equipo. Por la mañana, muchos de estos fueron a Vistalegre a ver al equipo de Balonmano, que ganó. También jugaron el Atleti 'B' que venció 1-2 al Real Madrid 'C' con doblete de Saúl y el Rugby Atleti que ganó al Universidad de Vigo.

Por su parte, el primer equipo jugaba a las 18:00 en casa frente al Valladolid. Buena entrada en el Calderón, muchos aficionados se desplazaron a la Ribera del Manzanares pese al frío y la lluvia. El Atlético salía con 4-4-2: Courtois; Juanfran, Godín, Miranda, Filipe; Koke, Gabi, Tiago, Arda, Falcao y Diego Costa.

El arranque de partido no favoreció al Valladolid, pues en el primer minuto Álvaro Sastre se lesionó tras un golpe en el muslo en un choque con Koke. Tuvo que entrar Alberto Bueno en su lugar. El Atleti fue dueño y señor de la primera parte, tocando la pelota con mucho criterio. El Valladolid sufría mucho en las contras y en los balones aéreos. Además, los de Djukic tenían un problema muy serio y esque no podían sacar el balón jugado. La presión del Atlético en 3/4 se lo impedía. En el minuto 30 llegaba el primer gol de los de Simeone en las botas de Godín, que en un mano a mano con Jaime le batía perfectamente por arriba. Fue un golazo, más propio de un delantero que de un central. En las botas de Falcao llegaba el segundo. El árbitro señaló un penalti que no era en el minuto 45 y Falcao lo transformó a la perfección.

La segunda parte fue la clásica empanada del Atlético que casi le cuesta el partido. Nada que ver con la primera parte. A los jugadores les quemaba la pelota en los pies y ya en vez de sacar el balón jugado se jugaba al pelotazo. En el 55, Alberto Bueno, que entró en el minuto 1 en sustitución de Sastre, hacía el gol de los de Pucela gracias a una cantada de Courtois, que no fue capaz de atrapar su disparo y el balón entró por el palo derecho. El Atleti se puso muy nervioso, más de lo que ya estaban. Era el día de las peñas y no podían fallar como ya pasó con el Rayo Vallecano, que a punto estuvieron de remontarnos un 4-0 en 10 minutos.

Finalmente, acabó el partido y el Atlético ganó. Sufrió pero se llevó los tres puntos, que era lo importante. Ahora hay que pensar en el partido del miércoles frente al Betis.