El Atleti obtuvo en la noche de ayer el pase matemático a los dieciseisavos de la UEFA Europa League tras vencer por la mínima (1-0) al Hapoel de Tel Aviv. Se empezó bien el partido. Dominando, presionando y atacando, tanto, que en el minuto 7 nos adelantábamos gracias a un gol de Raúl García. Adrián llegó hasta la línea de fondo, puso el pase de la muerte para Emre y este atrasó para Raúl, que, solo en la frontal, definió bien por arriba. Tras el gol se bajó la intensidad y el Hapoel fue de menos a más, pero siempre sin crear excesivo peligro. En la jornada siguiente nos jugaremos el liderato frente al Viktoria Pilsen, pasar como primero de grupo es fundamental, pues evitaríamos a todos los equipos que viniesen de la Champions (Probablemente City, probablemente Chelsea, Zenit...).

Simeone volvió a rotar. Ayer salían al Calderón asenjo en la portería, Cisma y Sílvio como laterales con Pulido y el Cata Díaz como centrales, un doble pivote formado por Mario Suárez y Emre, más adelante una línea de tres con Adrián y el Cebolla por bandas y Raúl García por el centro, y como referencia arriba Diego Costa.


Un Calderón casi vacío y el estilo del Hapoel contagiaron al Atlético, que tras el gol bajó la intensidad, quizás más de lo necesario. No sufrió como ya decíamos, pero el Hapoel llegaba y, a la contra, cualquier equipo te puede dar un susto. La manera de ganar no fue la más vistosa por así decirlo pero cualquier las victorias así también valen y el objetivo está cumplido.