Primera decepción de los hombres de Arsene Wenger esta
temporada. Tras una semana de mucha intensidad debido a las salidas de Alex
Song (el Barcelona lo ha comprado por 19 Millones de Euros) y sobre todo a la
de su máxima estrella, Robin Van Persie rumbo al Manchester United, el Arsenal
no ha podido imponerse a un combativo Sunderland.
Arsene Wenger espera que se cierre la incorporación de Nuri
Sahín como sustituto del camerunés Song.
De inicio, el técnico francés sacó un medio campo con muy
buen trato del balón, con los españoles Arteta y Cazorla como ejes del equipo y
Diaby recuperando todos los balones. Arriba, apostó por la velocidad en las
bandas de Gervinho y Walcott y como delantero Lukas Podolski. Gervinho fue
junto con Cazorla lo más destacado de la primera parte. Por su banda
partieron las mejores jugadas de peligro. Por fin se reivindico el
costamarfileño, que necesitaba un partido así ante su público, ya que el año
pasado dejó mucho que desear. Sólo le faltó el gol. Igual que al resto de su equipo, mucho
dominio, mucho control, toques y dominio pero poca resolución en los metros
finales. La primera parte dejó como ocasiones más importantes dos disparos de
Cazorla y uno de Diaby ante el que se tuvo que lucir el portero sacando una
mano prodigiosa cuando el Emirates Stadium ya cantaba el gol.
La segunda parte siguió con la tónica de la primera, un
Arsenal volcado en ataque, veía como no era capaz de marcar un gol ante un
ultradefensivo Sunderland, que aprovechaba cada momento para arañar minutos al
reloj, conocedores de la importancia de comenzar esta Premier consiguiendo un
punto contra un equipo de los de arriba. Wenger se percató de lo que todo el
Emirates veía, y quitó a un desaparecidísimo Podolski para dar entrada a otro
flamante fichaje, Olivier Giroud. El francés, máximo goleador de la pasada
Ligue 1, tuvo en sus botas la mejor ocasión del partido, pero envió muy
desviado su mano a mano tras un espectacular pase entre líneas de Cazorla.
El partido fue un monólogo del equipo londinense, que no
paró de buscar el gol sin suerte. El Sunderland, con un planteamiento
ultradefensivo, se mostró como un equipo correoso, que hará lo posible por
mantenerse un año más en la Premier.
El equipo de Wenger deberá mostrarse más acertado de cara al
gol si no quiere echar de menos estos puntos al final de la temporada, por el
momento, a tenor de lo visto, este partido se debe contar como dos puntos
perdidos, no como un punto a favor.
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